domingo, 10 de febrero de 2013

El valor de una visita


Reunión de negociosDesde los inicios de mi actividad profesional, he tenido ocasión de de asistir y participar en reuniones de todo tipo y característica, algunas con carácter comercial y otras muchas de tipo técnico y formativo.

Antiguamente era habitual entrar en despachos en los cuales encima de la mesa existían uno o varios teléfonos de los de disco y que servían de conexión del ocupante del despacho con el resto de la empresa.


Los despachos han ido evolucionando y lógicamente los medios a través de los que nos comunicamos; el correo electrónico ha ido desplazando al fax y los teléfonos móviles a los teléfonos fijos de despacho, con lo que la comunicación es mas directa, inmediata y sencilla. 

Recuerdo en muchas reuniones, en las que los asistentes a las mismas, además de poner encima de la mesa los cuadernos de espiral y el correspondiente material de escritura, ahora ya son más profusos los portátiles y los notebook, ponían los teléfonos móviles que siempre en un acto reflejo se dejaban en modo vibración para evitar la interrupción profusa por los timbres elegidos en los aparatos en cuestión.

Ahora es igual, eso no ha variado y los móviles ocupan espacio en las mesas formando parte del material aportado a la misma por cada interlocutor.

Llamadas y mensajes por movil


Lo que siempre he observado es esa tendencia que poco a poco se ha ido volviendo compulsiva de estar pendiente del teléfono. Hay gente que parece que si no está hablando por teléfono no está en una acción de trabajo y por ende productiva. El problema se plantea cuando en las reuniones damos mas importancia a una llamada, que además ahora se incrementa con los sistemas de chat móvil tipo Whatsapp o Line.

Vemos que los asistentes están pendientes del teléfono que constantemente emiten pitidos de recepción de nuevos mensajes, e incluso interrumpen la reunión aludiendo que lo que esta entrando es de vital importancia, rompiendo el ritmo y provocando que las mismas se dilaten en el tiempo, con la consiguiente pérdida de concentración en los asuntos a gestionar, la formación a recibir o el motivo por el cual dicha reunión se gestó y se convocó.

Siempre he sido defensor a ultranza de dar máxima prioridad a quien te visita en tu lugar de trabajo y por tanto a darle toda mi atención mientras dura su visita, fundamentalmente por varios motivos.

La persona que nos visita ha tenido que hacer un plus de gestión extra, que el que levanta un auricular para llamarnos y no digamos el que nos ha mandado un whatsapp para darnos algún tipo de información.

Esa persona que nos ha visitado, ha tenido que organizar una reunión contigo, ajustar una agenda, establecer un motivo y por último realizar un desplazamiento a tu centro de trabajo.

Para mi esa persona mientras dura su estancia en mi centro de trabajo tiene prioridad absoluta, el resto de las comunicaciones pueden esperar, primero porque no las podré dar la atención necesaria y segundo porque estoy poniendo en entredicho el valor de la presencia de esa persona en mi lugar de trabajo.

Hay muchos asuntos que se pueden gestionar por teléfono o correo, pero cuando hay que llegar a la reunión, hay que saber darle el valor que tiene a esa visita. 

Y para ti, ¿Qué lugar ocupa en tu escala de valores profesionales una visita?.







16 comentarios:

  1. Hola, Joaquín. Estoy totalmente de acuerdo contigo. Pienso que una visita requiere un esfuerzo, una molestia y cierto mérito que debe ser valorado. Muchas veces, un aparato nos facilita las cosas posibilitando la comunicación sin tener que movernos de la silla giratoria pero... cierta humanidad se pierde en el proceso. Ese trato tú a tú y ese apretón de manos desaparece quedando toda la negociación, trato o acuerdo en frío, casi gélido y carente de la confianza y seguridad que transmite ver a la otra persona a unos pasos de ti. Otro post de 10, como siempre y como siempre, un privilegio poder leerte. Un abrazo y buen domingo.

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  2. Actualmente se realizan muchas gestiones por via correo y telefono, pero al final siempre llegamos a la reunión presencial, que nos da mas elementos de llegar al detalle de los asuntos a tratar, si esas reuniones las focalizamos dandolas toda la atención necesaria, conseguiremos reuniones breves en el tiempo y con un alto nivel de productividad. Muchas gracias por tu comentario y por compartir tus opiniones en el. Abrazos y feliz tarde de Domingo.

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  3. Joaquín,

    Tienes 200% de razón en el planteamiento que haces, y va en dos vías: No solamente es importante el tiempo de esa persona que nos visita desde afuera, y debemos respetarla por el hecho de estar en nuestra oficina, seguramente para tratar un asunto de interés mutuo.

    También es importante para nosotros y el poder concentrar nuestra atención en el tema que tenemos a mano y no andar saltando de una cosa a otra sin más.

    Interesante tema. De esos detalles que, por pequeños, se suelen dejar a un lado

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    1. En los pequeños detalles es donde se marca la diferencia. Como siempre un placer contar con tu visita al blog y poder leer tus opiniones y comentarios. Un abrazo y feliz tarde de Domingo.

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  4. Toda la razón! Respondiendo a tu pregunta: para mi es principal. Considero que el contacto personal es muy importante y cálido para las relaciones profesionales,además se pueden sacar siempre mejores conclusiones. Mas de uno debería de aprender de tu escrito, o por lo menos incluir el respeto hacia la persona que tiene delante y dedicarle ese tramo de tiempo y prestarle atención. Se supone que los nuevos avances en las telecomunicaciones nos dan mas tiempo para escuchar, aprovechémoslos pues!

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    1. Totalmente de acuerdo con tu visión del tema y me gusta la parte final del comentario, los nuevos avances dan mas tiempo para escuchar, el problema es que no siempre estamos dispuestos a ello. Gracias Consuelo por pasarte por aquí y dejar tu opinión sobre el motivo del post. Buena tarde de Domingo. :)

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  5. Para mi también es prioritario. No hace ni tres días que viví esta experiencia de primera mano. Después de dos llamadas de teléfono para conseguir una cita con un banco y después de esperar una semana para llevarla a cabo, una no, dos llamadas de teléfono interrumpieron nuestra entrevista haciéndonos perder el hilo en las dos ocasiones y por el tipo de conversación tampoco parecía que se tratara de un tema que no pudiera espera media hora más. 
    Opino que si has concertado una visita, llegado el momento debería ser totalmente prioritario. Si alguien ha decidido acercarse a ti, merece toda tu atención y me parece, incluso de mala educación y falta de respeto, interrumpir esa visita para atender a otra, sea cual sea el canal  de comunicación.
    Yo también tengo ocasiones de asistir a reuniones y raro es el día en el que no se levante nadie para atender otro mensaje u otra llamada. Lo peor de todo es que parece que lo estemos aceptando como si fuese lo normal.

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    1. Creo que estamos aceptando muchos hábitos como normales cuando no lo son y eso al final da un indicativo de la madurez de la sociedad en la que vivimos. Como siempre un placer, leer tus comentarios, muchas gracias Maine por pasarte hoy por aquí. Buena tarde de Domingo :)

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  6. ¡¡Un tema muy interesante y actual!!
    Poco puedo añadir a lo tan bien expuesto, sólo algunos pensamientos que me venían a la cabeza a medida que leía:
    En la era de la comunicación en la que tenemos tantos medios para ello, hay mucha gente que se comunica menos que nunca.
    A veces, usar un móvil en medio de una cita, sea cual sea, además de demostrar mala educación, denota algo de inseguridad para continuar la conversación o es una buena táctica para dispersarla...
    Un abrazo ;-)

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  7. Muy buenos pensamientos Amaia creo que en dos párrafos has resumido la esencia del post. Muchas gracias por compartirlos aquí. Un abrazo y feliz noche de domingo :)

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  8. Que necesario es este post Joaquin. Llevándolo al absurdo, es como el que se levanta cada 5 minutos a ver si su coche no se lo ha llevado la grua, los que llaman 20 veces a la canguro a ver si los niños están bien, y así sucesivamente mil faltas de respeto por el interlocutor que tienen delante, y que está poniendo su tiempo a disposición de la entrevista o reunión.
    Todo se resume en una palabra.....educación

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    1. Perfecto resumen, Reyes, muchas gracias por comentar y dejar tu opinión en el blog. :)

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  9. La educación es un valor cada día más en desuso. Valoramos solo nuestro tiempo y restamos valor al de los demás.
    Al menos para mi, la educación es lo primero que valoro en una persona porque si esta es educada, lo demás por lo general, viene dado.
    Me ha encantado el post aunque me da pena que hayas necesitado escribirlo.

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    1. Mónica, que no te de pena, los post se escriben para divulgar ideas y opiniones y en este caso creo que es un fenomeno que parece estar arraigado como costumbre y por tanto merecía comentarse. Muchas gracias por leerme y por dejar tu opinión. Un saludo :)

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  10. Joaquin!!! Qué nerviosa me pongo cuando voy a una reunión concertada de antemano y me dejan a media palabra por contestar al teléfono...Casi siempre se disculpan, pero es verdad, eso no está bien...Hay que priorizar ;-) Y SI, yo ya prioricé, doy valor a esa visita concertada porque cuando da comienzo, mi móvil ya está apagado y eso que yo soy "moviladicta".
    Me ha encantado que hayas sacado el tema y que lo hayas dirigido tan maravillosamente.
    Enhorabuena!!!
    Un besazo!!!

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  11. Y a mí que hayas dejado tu comentario en el blog con la expresividad que te caracteriza, gracias Pilar por dejarte ver por aquí y dedicar unos minutos a la lectura del post. :)

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